
Hace un año, en Bonaigua comenzamos la Adoración Eucarística dirigida de modo especial a los jóvenes. Aquel viernes de enero de 2022, en la capilla de Montse éramos cuatro personas. El viernes pasado, en el salón de actos, llegamos a un centenar. En medio ha habido mucha gracia de Dios, y muchos jóvenes que han querido seguir de cerca a Jesús en la Eucaristía. Y esto, a pesar de que estábamos en medio de los exámenes de enero. Las condiciones del oratorio-salón de actos del Oratorio son inmejorables: amplio, silencioso, recogido, un foco alumbra el sagrario, y concentra nuestra mirada en el más importante de todos. Y unas canciones que cada vez suenan mejor, y que te ayudan a rezar casi sin querer. Gracias a todos los que estáis apoyando esta actividad. Bonaigua está en medio de la zona universitaria: no dejéis de invitar a muchos amigos, para que esa luz en medio del campus brille cada vez con más fuerza. Y muchas gracias a todos los que os encargáis de los cantos.
¡Ah! Se me olvidaba. La adoración del viernes tuvo un aliciente especial: el testimonio de Mn. Josep María Quintana -acompañado por Xavier Pacheco- sobre la “Macrofiesta del Rosario”, que todos los domingos se emite a las 21.30 en Instagram. No sabía que un rosario en las redes sociales diera para que tanta gente se planteara a fondo el amor a Jesús y a su Madre. Ahora, los de la Adoración estamos comprometidos con la macrofiesta. En el aire queda que el rosario de la macrofiesta se rece un día desde Bonaigua. Ahí está nuestro compromiso.
Xavier
